El Día Mundial del Hiyab (en inglés World Hijab Day) es un evento anual que se celebra desde hace 6 años.
El 1 de febrero de cada año, la organización del WHD pide a la ciudadanía de todas las confesiones que se ponga el pañuelo durante un día en señal de solidaridad con las mujeres musulmanas del mundo entero.
La intención de tal evento es conseguir un mundo más pacífico en el que los ciudadanos se respeten mutuamente. WHD centra sobre todo sus esfuerzos en combatir la intolerancia, la discriminación y los prejuicios hacia mujeres musulmanas. Esto es fundamental en los tiempos que corren, en los que se está prohibiendo el uso del pañuelo en algunos países y en otros las mujeres que lo llevan son objeto de acoso físico y verbal; en líneas generales, es básico ahora que la islamofobia va en aumento.
La senadora del Estado de Nueva York, Roxanne J. Persaud, se unió al WHD con el siguiente comunicado:
“Se dice que el saber es poder: WHD se nos presenta como una oportunidad para que aprendamos acerca de esta costumbre religiosa y para reducir la discriminación hacia las mujeres musulmanas que llevan el hijab. Hago un llamamiento a que todo el mundo haga una demostración de libertad religiosa con tolerancia y aceptando la riqueza que nos trae la diversidad. Al mostrar tolerancia, estamos reconociendo los derechos humanos y libertades fundamentales universales de los demás. Nuestro compromiso con la libertad religiosa debe ser congruente con nuestras acciones: debemos combatir juntos la intolerancia religiosa y el odio.”
Nazma Khan, nacida en Nueva York, inició este movimiento global con la intención de sensibilizar sobre un asunto que le afecta tanto a ella como a millones de mujeres musulmanas en el mundo entero. Fue acosada emocional y físicamente en numerosas ocasiones cuando crecía en Nueva York. La presencia de este tipo de ataques en contra de los musulmanes (especialmente mujeres con hijab) ha ido en aumento después del 11-S. Creando este movimiento su propósito fue el de compartir ese dolor con los demás y que nadie vuelva a vivir esos traumas por el hecho de practicar una religión.
El 1 de febrero de 2013, pidió a compañeras de cualquier confesión del mundo entero que se pusieran el hiyab durante un solo día. Ocho días después, mujeres de 67 países distintos y de entornos religiosos diversos: cristianos, judíos, ateos, rastafaris, budistas, etc, respondieron afirmativamente uniéndose así a la iniciativa.
WHD supuso una oportunidad para ciudadanos del mundo entero que no estaban familiarizados con la fe islámica establecieran un diálogo con sus vecinos, compañeros y amigos musulmanes.
Este año el hashtag elegido por la organización es #StrongInHijab, que significa “Fuerte en mi hiyab” o “La fortaleza de mi hiyab”.
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